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Qué es la hipertensión arterial?

Qué es la hipertensión arterial?

Es una enfermedad sistémica que consiste en la elevación crónica de la presión arterial por encima de los valores normales.

Tradicionalmente se considera Hipertensión Arterial (HTA) cuando las cifras de presión arterial son iguales o mayores de 140 mmHg la presión arterial sistólica (PAS) y 90 mmHg la presión arterial diastólica (PAD).

Es una enfermedad sistémica, porque afecta a varios órganos del cuerpo, fundamentalmente se afectan el corazón, el riñon, las arterias, los ojos y el cerebro. A estos órganos los médicos los conocemos como órganos diana que son afectados por la HTA.



¿CÓMO SE CLASIFICA LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL?

Quizá resulta complicado que el paciente entienda las diversas clasificaciones de la presión arterial, aquí describimos dos de las clasificaciones mas importantes en el mundo de la medicina: la clasificación americana (Tabla Nro.:1) y la clasificación europea (Tabla Nro.: 2)

Tabla Nro.: 1 .- VALORES DE REFERENCIA DE LA PRESIÓN ARTERIAL (Según, The Seventh Report of the Joint National Committee on Prevention, Detection, Evaluation, and Treatment of High Blood Pressure - JNC 7, de los EE.UU.)

¿CUÁLES SON LAS CAUSAS DE HIPERTENSIÓN ARTERIAL?

En un 90% de los casos no conocemos las causas, a ello lo llamamos Hipertensión Primaria o Esencial.

En un 10% podemos encontrar las causas, a ello denominamos: Hipertensión Secundaria. 

Las siguientes son causas identificables de HTA secundaria: 

Apnea del sueño.

Medicamentos: corticoesteroides, antiinflamatorios no esteroideos, algunos anticonceptivos orales, ciclosporina, tacrolimus, algunos antidepresivos

Enfermedades renales: glomerulonefritis, tumores renales, poliquistosis, estenosis vascular renal.

Transtornos hormonales: feocromocitoma, sindrome de Cushing, hiperaldosterenismo primario, enfermedades de la tiroides, enfermedades de la paratiriodes.

Consumo de Substancias psicoactivas: cocaína, abuso del alcohol, anfetaminas; etc.

Coartación de aorta.

¿QUÉ FACTORES DE RIESGO ESTÁN IMPLICADOS EN EL DESARROLLO DE ENFERMEDAD CARDIOVASCULAR ADEMÁS DE LA HTA?

Es importante conocer los factores de riesgo de enfermedad cardiovascular, porque la enfermedad cardiovascular es una de las primeras causas de muerte en todos los países del mundo.

Se consideran factores de riesgo mayores y por consiguiente muy importantes en el desarrollo de enfermedad cardiovascular a los siguientes:

HTA

Tabaquismo

Obesidad (índice de masa corporal mayor o igual a 30 Kg/m2)

Inactividad física

Dislipemia (Colesterol alto o trigliceridos altos)

Diabetes Mellitus

Microalbuminuria (pérdida de albumina por encima de los valores normales en orina, que puede pasar inadvertida, pero cuando se diagnóstica es indicador de gravedad renal)

Edad > de 55 para los varones y de 65 para las mujeres.

Historia familiar de enfermedad cardiovascular precoz ( que hayas tenido familiares con enfermedad: hombres por debajo de 55 años y mujeres por debajo de 65 años).

En este caso, si hay factores asociados a la HTA, será mas probable de desarrollar patología cardiovascular en un futuro cercano. Como te darás cuenta solo la edad y la historia familiar son factores de riesgo imposibles de controlar.

¿CÓMO SE HACE EL DIAGNÓSTICO DE HTA? 

El diagnóstico es muy fácil: La medida se debe hacer si es posible en dos oportunidades y hacer una media de los valores. La forma de medirlo lo describimos mas abajo.

Debemos saber que habitualmente la hipertensión arterial es asintomática, es decir que una persona puede estar "aparentemente sana" pero en el fondo sus cifras de presión estan elevadas. Solo se hace evidente cuando ya a afectado severamente a algún órgano diana (corazón, cerebro, riñon, arterias u ojos).

Rara vez, un paciente con HTA puede tener síntomas al inicio de la enfermedad, estos son: dolor de cabeza, zumbido de oídos, mareos, enrojecimiento facial, naúseas, vómitos ó fatiga.



¿PORQUÉ ES IMPORTANTE CONOCER SOBRE HTA?

Hay muchas razones por lo que se considera importante esta enfermedad, he aquí algunas razones:

Es una enfermedad muy prevalente (muchos casos en todo el mundo), y uno de los factores de riesgo muy importantes de enfermedad cardiovascular.

Porque hay mucha gente que no sabe que tiene esta enfermedad y nunca se ha hecho mediciones de su presión arterial.

Porque la mayoría de pacientes hipertensos hacen un mal control de su enfermedad (cerca del 80%), ya que si no tienen síntomatología no toman en serio un buen control, o en todo caso el personal sanitario que los atiende no les hace un control adecuado basándose en las normas estandarizadas de hoy en día.

¿A QUÉ ÓRGANOS DIANA AFECTA (COMPLICACIONES) LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL?

Si un paciente no controla su Hipertensión, estos son los órganos que pueden afectarse:

El Corazón: Aumenta de tamaño (hipertrofia ventricular izquierda) porque tiene que bombear la sangre con mayor fuerza , también es mas factible de sufrir angina (dolor en el corazón) e inclusive infarto del miocardio, además se vuelve insuficiente (insuficiencia cardiaca).

Al Cerebro: Lo mas peligroso a nivel cerebral es que se produzca una hemorragia intracerebral por rotura de algún vaso sanguineo cerebral, además pueden haber cuadros de isquemia cerebral (diversas zonas del cerebro se quedan sin irrigar y mueren). Estos cuadros comunmente se traducen como parálisis o paresias de un lado del cuerpo (imposiblidad total o parcial para mover los miembros de un lado del cuerpo).

El riñón: Puede ser causa para que el riñon se torne insuficiente, cuando el riñon se daña el pronóstico del paciente se hace mas desfavorable, es por eso que hoy en día se pide controles periódicos de pruebas para medir la función renal: microalbuminuria, depuración de creatinina.

Los Ojos: Cuando no hay control de la hipertensión puede producirce una oftalmopatía hipertensiva, lesiones hemorragicas a nivel de retina, a nivel de nervio óptico, que hacen que la visión se vuelva borrosa, e inclusive llegar a la ceguera.

Las arterias: Se dilatan porque hay mas presión dentro de ellas y es fácil a que se formen aneurismas y su posterior rotura, también las placas de colesterol se impregnan mas en las arterias (ateroesclerosis), corriendo el riesgo de que se rompan y se generen trombos.



¿CUÁLES SON LAS MEDIDAS GENERALES EMPLEADAS EN EL TRATAMIENTO Y LA PREVENCIÓN DE ESTA ENFERMEDAD?

Lo mas importante es practicar un estilo de vida saludable, y esto consiste en lo siguiente:

Disminuír el peso: Si el paciente está con sobrepeso u obesidad, esta demostrado que por al reducir 10 kilogramos, la presión arterial va a disminuír entre 5 a 20 mmHg. Esto se logra con una dieta adecuada, actividad física, y si corresponde el uso de fármacos. Puedes ver mi página sobre OBESIDAD

Dejar de Fumar: El tabaco es uno de los principales factores de riesgo cardiovascular, además hay datos existentes de que interfiere en los efectos beneficiosos de algunos fármacos antihipertensivos (betabloqueantes). Para dejar de fumar se puede usar sustitutos de nicotina ó bupropion (anfebutamona) que aparentemente son seguros en HTA (se debe tener cuidado sobretodo al asociar sustitutos de nicotina y bupropion)(Fuentes: 1 y 6). Si deseas ampliar información esta es mi página de TABAQUISMO

Moderar el consumo del alcohol: El alcohol eleva la presión arterial y también atenua los efectos de algunos fármacos antihipertensivos (Fuente: 1). Su disminución implica reducir la presión entre 2 a 4 mmHg (Fuente: 4).

Hacer una dieta rica en frutas y vegetales, y baja en grasas saturadas y total: El pescado es pobre en grasas saturadas.

Disminuir el sodio (sal) de la dieta: Evitar los alimentos salados, y productos embazados que utilizan al sodio como preservante.

Hacer actividad física: Caminar, correr o nadar 30 a 45 minutos, entre 3 a 4 veces por semana. Es necesario para esto consultar con el médico si es factible hacerlo. La actividad física también se ha demostrado que baja la presión arterial.

¿QUÉ MAS DEBO SABER ACERCA DEL TRATAMIENTO DE LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL (IMPORTANTE)?

Que también la cafeína puede estar relacionada con cifras altas de presión arterial, por tanto se debe reducir su consumo.

El paciente hipertenso, debe tener en cuenta que hay medicamentos que pueden agravar su HTA: antiinflamatorios, descongestionantes nasales, anticonceptivos, eritropoyetina, efervecentes, etc.

Que para medir la presión en un obeso también puede ser recomendable el uso de un tensiómetro de muñeca homologado, será mas fácil su uso porque el perímetro de la muñeca no varía.

Que en los ancianos también estamos obligados a bajar la PAS y PAD por debajo de 140 y 90 mmHg respectivamente, para hablar de un buen control de HTA.

Que el tratamiento antihipertensivo es para toda la vida.

Que los medicamentos usados en una mujer embarazada con hipertensión son la hidralacina y la metildopa.Que en caso de ser Hipertensión Secundaria debido a feocromocitoma el medicamento mas usado es la fentolamina.

Que en pacientes asmáticos y con insuficiencia cardiaca se deben tener cuidado al administrar fármacos de tipo betabloqueantes.

Que en varones con enfermedad prostática, una alternativa son los alfabloqueantes.

Si el paciente tiene daño renal se recomiendan el uso de antihipertensivos del tipo IECA o ARA II.





FUENTES:

European Society of Hypertensión / European Society of Cardiology : "Directrices para el tratamiento de la Hipertensión" 2003.

George A. Mensah, MD y colaboradores: "Hipertensión Clínica". En Clínicas Cardiologicas de Norteamérica. Vol:2 Mc Graw Hill, Philadelphia, 2002.

Primer Congreso de la Sociedad Madrileña y Factores de Riesgo Cardiovascular, celebrado en Madrid del 4 al 5 de febreo del 2004.

Seventh Report of the Joint National Committee on Prevention, Detection, Evaluation, and Treatment of High Blood Pressure (JNC 7) de los EE.UU. En: http://www.nhlbi.nih.gov/guidelines/hypertension/jncintro.htm Web visitada el 21 de Febrero de 2004

IV Encuentro Nacional de Salud y Medicina en la Mujer, celebrado en el Palacio de los Congresos, en Madrid del 25 al 27 de febrero del 2004.

Tonstad S et al. "Bupropion SR for somoking cessation in smokers with cardiovascular disease: a multicentre, randomised study. Eur Heart J. 2003 May; 24(10):946-55.

La obesidad

 
La obesidad es una enfermedad crónica y progresiva que responde a múltiples factores:
Propias del individuo: genéticos, hereditarios, metabólicos, endócrinos, alteración en la conducta alimentaria (ingesta excesiva, transgresiones, consumo de comidas rápidas hipercalóricas), consumo de cierto tipo de medicación.
Ambientales: estilo de vida, sedentarismo, mínima práctica de actividad física, stress asociado a las exigencias laborales. Existe un desequilibrio entre la ingesta energética y el gasto calórico, lo que lleva a una acumulación excesiva de tejido graso.
La obesidad no solo representa una patología por si misma, sino que también lleva al desarrollo de numerosas enfermedades asociadas (comorbilidades) y trastornos emocionales.
Enunciamos como ejemplo: enfermedades cardiovasculares (hipertensión, infarto, várices), apnea del sueño, trastornos respiratorios (asma, broncoespasmo), problemas osteoarticulares, diabetes mellitus, hiperinsulinemia, aumento del colesterol y triglicéridos, reflujo gastroesofágico, trastornos en la menstruación, incontinencia urinaria, disfunción sexual, distorsión de la imagen corporal, dificultad para relacionarse con el entorno, depresión, ansiedad, aislamiento, disminución de la autoestima, inseguridad, deterioro de la calidad de vida.

Cómo controlar la ansiedad

¿CÓMO CONTROLAR LA ANSIEDAD? Te lo explicamos con consejos y estrategias sencillas.  La RAE define la ansiedad como: "El estado de agitación, inquietud o zozobra del ánimo". Sin embargo, realmente quienes la han sufrido alguna vez, la sufren esporádicamente o para aquellos que es su gran compañera del día a día es algo que merece una definición de más de nueve palabras.  En primer lugar, no toda la ansiedad es perjudicial para nuestro cuerpo y mente, existe cierto nivel de ansiedad positiva, esa pequeña inquietud que nos ayuda en situaciones complicadas a salir airosos. Es decir, nos ayuda a estar alerta ante posibles peligros o atentos a acontecimientos relevantes. Funciona como una especie de "ángel de la guardia" interior.  La ansiedad también puede ser negativa Por otro lado, encontramos la ansiedad negativa... ¿En qué se diferencia de la anterior? este tipo de ansiedad provoca un miedo exagerado e irracional ante un acontecimiento (como por ejemplo el miedo a hablar en público, a subir en ascensor, etc.) que a parte de las obvias reacciones psicológicas se acompaña de reacciones físicas (sudores, palpitaciones, temblores, molestias gástricas...) ante la expectativa de que algo catastrófico suceda aun siendo ésto muy poco probable.  Se derivan diversos trastornos a partir de la ansiedad negativa, como son:  Trastorno de pánico Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) Trastorno de estrés postraumático (TEPT) Fobia social (o trastorno de ansiedad social) Fobias específicas Trastorno de ansiedad generalizada (TAG) Técnicas para reducir la ansiedad Aunque cada uno de los cuales tiene un tratamiento específico, podemos añadir una serie de técnicas que ayudan a mejorar los estados de ansiedad:  1. Ejercicio físico El ejercicio físico nos ayudará a evitar el exceso de activación del sistema nervioso y a conseguir un sueño más reparador. Si nuestro estado físico no nos permite la realización de ejercicio podemos optar por ritmos suaves a intervalos breves.  2. El sueño y los hábitos de alimentación Una alimentación desequilibrada puede perjudicar a algunos síntomas gastrointestinales asociados con algunos estados de ansiedad, una alimentación saludable y equilibrada nos ayudará a controlarla. Respecto al sueño, los beneficios de dormir bien son obvios, si vemos que la ansiedad no nos deja dormir (o peor, el pensamiento de que no podemos dormir, no nos deja dormir) podemos optar por leer algo aburrido hasta que el propio sueño venga a visitarnos.  3. Modelado (observación) Como aprendimos de Albert Bandura, podemos emplear el modelaje observando a otras personas que no muestran ansiedad ante acontecimientos que a nosotros si no muestran esas sensaciones temidas. Incluso, conversar con personas que han conseguido superar problemas de ansiedad y que le comenten las técnicas que a ellos le han funcionado le harán recuperar la esperanza en que sí se puede controlar la misma.  4. Sentido del humor  Nuestra tendencia ante las situaciones que nos provocan ansiedad es reaccionar con negatividad y tomárnoslo demasiado en serio. A veces, una persona con ansiedad no se puede dar cuenta de lo ridícula que puede ser su reacción. Es importante ver también la parte divertida y optimista de las cuestiones. Por ejemplo, ante un pensamiento recurrente, podemos probar a cantarlo o a decírnoslo en otro idioma.  5. Meditación y Mindfulness Es probable que ya hayas oído hablar del Mindfulness, es una técnica de meditación que le ayudará a conseguir la atención plena. En un ambiente relajado, donde se asegure de que nadie va a molestarle, céntrese en su respiración, en las sensaciones corporales, en el sonido o en un objeto y practique la atención plena. Si quieres conocer distintas maneras de practicar Mindfulness, puedes leer nuestro artículo: “5 ejercicios Mindfulness para mejorar tu bienestar emocional”.  6. Métodos de distracción Si empleamos distracciones adecuadas podemos interrumpir, aunque sea temporalmente, el pensamiento que nos provoca ansiedad: parada de pensamiento, lectura, ocio, pasear, entre otros.  7. Psicofármacos Es posible que su ansiedad tenga un componente físico. Si su médico confirma que su dolencia no es física sino mental, puede solicitar cita con un psiquiatra y que unos ansiolíticos puedan ayudarle. Los medicamentos pueden ser de mucha utilidad aunque también debe poner de su parte. No se le ocurra automedicarse aunque otra persona le haya dicho que le haya ido bien.  Las recaídas cuando uno sufre ansiedad En caso de haber estado o estar asistiendo a psicoterapia no se tome las recaídas como un fracaso, sino algo de lo que podemos aprender y conocernos mejor para poder prevenirlo en un futuro.  Antes de finalizar, un consejo... Y recuerde, por supuesto, que la ansiedad es como nuestro guardián interior. Aprender de ella, aprender a manejarla, puede ayudarnos a estar alerta ante las situaciones correctas y a salir airosos de nuestros retos personales del día a día. Con estas siete técnicas y estrategias para reducir la ansiedad puedes estar más cerca de poner un nuevo rumbo en tu vida.
 
Te lo explicamos con consejos y estrategias sencillas.

La RAE define la ansiedad como: "El estado de agitación, inquietud o zozobra del ánimo". Sin embargo, realmente quienes la han sufrido alguna vez, la sufren esporádicamente o para aquellos que es su gran compañera del día a día es algo que merece una definición de más de nueve palabras.

En primer lugar, no toda la ansiedad es perjudicial para nuestro cuerpo y mente, existe cierto nivel de ansiedad positiva, esa pequeña inquietud que nos ayuda en situaciones complicadas a salir airosos. Es decir, nos ayuda a estar alerta ante posibles peligros o atentos a acontecimientos relevantes. Funciona como una especie de "ángel de la guardia" interior.

La ansiedad también puede ser negativa
Por otro lado, encontramos la ansiedad negativa... ¿En qué se diferencia de la anterior? este tipo de ansiedad provoca un miedo exagerado e irracional ante un acontecimiento (como por ejemplo el miedo a hablar en público, a subir en ascensor, etc.) que a parte de las obvias reacciones psicológicas se acompaña de reacciones físicas (sudores, palpitaciones, temblores, molestias gástricas...) ante la expectativa de que algo catastrófico suceda aun siendo ésto muy poco probable.

Se derivan diversos trastornos a partir de la ansiedad negativa, como son:

Trastorno de pánico
Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
Trastorno de estrés postraumático (TEPT)
Fobia social (o trastorno de ansiedad social)
Fobias específicas
Trastorno de ansiedad generalizada (TAG)
Técnicas para reducir la ansiedad
Aunque cada uno de los cuales tiene un tratamiento específico, podemos añadir una serie de técnicas que ayudan a mejorar los estados de ansiedad:

1. Ejercicio físico
El ejercicio físico nos ayudará a evitar el exceso de activación del sistema nervioso y a conseguir un sueño más reparador. Si nuestro estado físico no nos permite la realización de ejercicio podemos optar por ritmos suaves a intervalos breves.

2. El sueño y los hábitos de alimentación
Una alimentación desequilibrada puede perjudicar a algunos síntomas gastrointestinales asociados con algunos estados de ansiedad, una alimentación saludable y equilibrada nos ayudará a controlarla. Respecto al sueño, los beneficios de dormir bien son obvios, si vemos que la ansiedad no nos deja dormir (o peor, el pensamiento de que no podemos dormir, no nos deja dormir) podemos optar por leer algo aburrido hasta que el propio sueño venga a visitarnos.

3. Modelado (observación)
Como aprendimos de Albert Bandura, podemos emplear el modelaje observando a otras personas que no muestran ansiedad ante acontecimientos que a nosotros si no muestran esas sensaciones temidas. Incluso, conversar con personas que han conseguido superar problemas de ansiedad y que le comenten las técnicas que a ellos le han funcionado le harán recuperar la esperanza en que sí se puede controlar la misma.

4. Sentido del humor

Nuestra tendencia ante las situaciones que nos provocan ansiedad es reaccionar con negatividad y tomárnoslo demasiado en serio. A veces, una persona con ansiedad no se puede dar cuenta de lo ridícula que puede ser su reacción. Es importante ver también la parte divertida y optimista de las cuestiones. Por ejemplo, ante un pensamiento recurrente, podemos probar a cantarlo o a decírnoslo en otro idioma.

5. Meditación y Mindfulness
Es probable que ya hayas oído hablar del Mindfulness, es una técnica de meditación que le ayudará a conseguir la atención plena. En un ambiente relajado, donde se asegure de que nadie va a molestarle, céntrese en su respiración, en las sensaciones corporales, en el sonido o en un objeto y practique la atención plena. Si quieres conocer distintas maneras de practicar Mindfulness, puedes leer nuestro artículo: “5 ejercicios Mindfulness para mejorar tu bienestar emocional”.

6. Métodos de distracción
Si empleamos distracciones adecuadas podemos interrumpir, aunque sea temporalmente, el pensamiento que nos provoca ansiedad: parada de pensamiento, lectura, ocio, pasear, entre otros.

7. Psicofármacos
Es posible que su ansiedad tenga un componente físico. Si su médico confirma que su dolencia no es física sino mental, puede solicitar cita con un psiquiatra y que unos ansiolíticos puedan ayudarle. Los medicamentos pueden ser de mucha utilidad aunque también debe poner de su parte. No se le ocurra automedicarse aunque otra persona le haya dicho que le haya ido bien.

Las recaídas cuando uno sufre ansiedad
En caso de haber estado o estar asistiendo a psicoterapia no se tome las recaídas como un fracaso, sino algo de lo que podemos aprender y conocernos mejor para poder prevenirlo en un futuro.

Antes de finalizar, un consejo...
Y recuerde, por supuesto, que la ansiedad es como nuestro guardián interior. Aprender de ella, aprender a manejarla, puede ayudarnos a estar alerta ante las situaciones correctas y a salir airosos de nuestros retos personales del día a día. Con estas siete técnicas y estrategias para reducir la ansiedad puedes estar más cerca de poner un nuevo rumbo en tu vida.

Menú para tu sistema inmunológico

Menú para tu sistema inmunológico
 
La alimentación puede ser nuestra mejor aliada para fortalecer nuestras defensas y prevenir que padezcamos una gripe durante este invierno. Por eso, debemos prestar especial atención a lo que comemos durante esta época del año, particularmente propensa a la inmunodepresión.

La mejor dieta es aquella que es equilibrada y que se combina con un estilo de vida saludable. Pero es que además, si introducimos en la misma ciertos alimentos de temporada que conllevan un fortalecimiento de nuestras defensas estaremos ayudando a nuestro sistema inmunológico a defenderse frente a los agentes externos que puedan debilitarlo. Por ello siempre es recomendable que, además de tomar un antigripal en el caso de que estemos ya enfermos, añadamos a nuestra cesta los siguientes alimentos:

Cítricos
Frutas como el limón o la naranja, al igual que las verduras de hoja verde como las espinacas, son ricas en Vitamina C. Ésta ayuda a aumentar y fortalecer las defensas, además de a aliviar los síntomas en el caso de que ya hayamos contraído una gripe o resfriado.

Ajo y cebolla
Ambos tienen un componente antiviral y antibacteriano que nos protege de contraer infecciones. Además, no sólo incrementan nuestras defensas sino que también mejoran nuestra respuesta frente a virus y bacterias y favorecen el proceso de curación.

Alimentos antioxidantes
En este grupo podemos incluir frutas y verduras como la remolacha, el brócoli, o la granada. Su poder antioxidante impide el efecto perjudicial de los radicales libres en nuestro organismo, además de ayudar a eliminar las toxinas y fortalecer el sistema inmune.

Huevos
Este alimento contiene dos minerales esenciales para nuestras defensas, que son el zinc y el selenio. Además, su composición es muy rica en vitaminas, ácidos grasos y proteínas de alto valor bilógico, por ello es recomendable incorporarlos a nuestra dieta si queremos prevenir una infección.

Alimentos fermentados
Las bacterias vivas que contienen son una fuente de probióticos, que nos ayudan a potenciar el buen crecimiento de la flora bacteriana, produciendo efectos beneficiosos no sólo en el sistema digestivo, inmunitario y en el resto del organismo. En este grupo se encuentra el yogur, el queso y nuevos productos que se están introduciendo en nuestra dieta como el kéfir.

Alimentos ricos en vitaminas A, B y E
En los alimentos rojos, en los vegetales verdes y en otros productos, como la zanahora y la calabaza, podemos encontrar la vitamina A, un componente que ayuda a mejorar la inmunidad de nuestra piel. En cambio la B (B1, B2, B5 Y B12), que sirve para aumentar nuestras defensas, está más presente en legumbres y cereales, además de en lácteos o en determinados pescados. Un efecto que también produce la vitamina E, que podemos encontrar por ejemplo en el aceite de oliva o en los frutos secos.

Jengibre
Como complemento, podemos incorporar esta raíz de la cocina asiática, conocida por sus propiedades medicinales. Además de ayudar al sistema digestivo y circulatorio, el jengibre también combate los virus y bacterias dañinos, ya que es rico en nutrientes como el potasio, la niaciana y la vitamina C, además de contar con propiedades expectorantes, antitusivas y antiinflamatorias, lo que nos puede ayudar a combatir varios de los síntomas de la gripe o el resfrío.