Como enfermedad que es, la obesidad se está convirtiendo en uno de los mayores factores de incapacidad para la población. Los problemas asociados al aumento del índice de grasa y del peso corporal pueden ir desde la fatiga crónica al subir escaleras o realizar cualquier actividad física hasta la incapacidad total para levantarse de la cama y realizar tareas tan simples y cotidianas como asearse.
De hecho, y aunque apenas están teniendo repercusión en los medios de comunicación, se han dado ya casos de personas que han sido despedidas de sus trabajos debido a su peso.
Como dato, el Centro para el Control de Enfermedades informó recientemente que en los Estados Unidos, más del 31% de los adultos obesos informaron un diagnóstico médico de artritis en comparación con solo el 16% de los no obesos.
PROBLEMAS MUCULOESQUELÉTICOS ASOCIADOS A LA OBERSIDAD
Padecer sobrepeso u obesidad no implica sólo problemas de salud a nivel cardiovascular. El sistema musculoesquelético también se va a ver afectado, y dependiendo del grado de sobrepeso u obesidad las secuelas serán más o menos importantes.
A pesar de que nuestros huesos tengan cierto grado de maleabilidad, el sobrepeso va a ir deformando los huesos, haciendo que estos no crezcan en su posición natural y generando, en el futuro, problemas articulares que pueden significar una mayor fragilidad en ciertas zonas como por ejemplo los tobillos, la tibia/peroné, brazos...
Osteoartritis
La osteoartritis es la forma más común de artritis y la principal causa de discapacidad crónica entre las personas mayores, y la obesidad es un factor de riesgo determinante significativo tanto para el desarrollo como para la progresión de la artrodesis de rodilla tibio-femoral.
Osteoartritis
También se ha demostrado una leve asociación entre la obesidad y la osteoartritis en otros sitios, como la articulación de la cadera, la mano y la articulación patelofemoral, lo que sugiere que factores mecánicos y metabólicos pueden ser responsables del vínculo entre la osteoartritis y la obesidad.
Las formas más comunes de osteoartritis son las de rodilla y cadera, y como podéis imaginar son dos patologías que pueden acabar provocando limitaciones funcionales y una incapacidad bastante importante, debido a que son dos zonas de nuestra anatomía que influyen directamente en nuestras posibilidades de desplazamiento y movilidad.