El mes de diciembre está cargado de eventos con multitud de alimentos hipercalóricos y que pueden dañar nuestra salud. Para no privarnos de "lo rico" ni abusar de su consumo compartimos algunas estrategias.
A pocos días de las fiestas y con el inicio de las celebraciones de fin de año, es común que los regímenes alimentarios sufran algunos desfasajes. Los eventos sociales se hacen frecuentes y comienzan a incorporarse alimentos copiosos y pesados. Luego, al querer recuperar la alimentación diaria, se cometen algunos desajustes que no hacen bien a la salud y que se manifiestan con algunos problemas.
No saltear ninguna comida durante el día del evento para no tener un hambre “voraz” en la reunión (esto porque el hambre hace que se coma mucha cantidad de alimentos durante un corto periodo de tiempo);
Intentar comer saludable durante el día. Esto implica desayunar frutas, yogurt; almorzar con buena cantidad de verduras; tomar mucha agua; etcétera;
Realizar ejercicio los días previos y caminar al menos 20 minutos durante el día de la celebración para gastar las calorías que se van a consumir;
Planificar qué se va a comer la noche de las fiestas y en qué cantidad. Para ello, es importante seleccionar lo que apetece, no servirse en grandes cantidades, probar una variedad y comer despacio;
No hacer de la comida el eje del evento;
Preparar alimentos más frescos, que contengan buena cantidad de vegetales;
Incorporar frutas en los postres;
Evitar garrapiñadas, turrones y mantecol, entre otras golosinas de invierno;
Elaborar snacks con cerezas, frutillas, sandía, melón;
Preparar licuados con fruta (para disminuir el consumo de alcohol y bebidas azucaradas);
Elaborar aguas vitaminadas con frutas (como frutillas; menta; limón; pomelo) y jugos de frutas y endulzadas con edulcorante;
Alternar las bebidas alcohólicas con agua, con soda o con bebidas sin azúcar;
Consumir las variantes dietéticas de las bebidas habituales;
Moderar el consumo de alcohol.
¿Cómo desintoxicarse si se abusa de alimentos pesados para las fiestas?
Si se “empacha” con las comidas festivas es importante que al día siguiente se consuman alimentos livianos como té, infusiones, abundante agua y alimentos de fácil digestión (pollo, bifes, verduras cocidas, arroz).En caso de querer compensar el exceso de calorías, se puede consumir buena cantidad de ensaladas, frutas, yogurt y mucha agua.
Al mismo tiempo, es fundamental hacer ejercicio.
Sin embargo, este no debe realizarse en las horas pico de calor (entre las 11 y las 16) para evitar accidentes, radiación solar excesiva, aumento de la presión arterial, desvanecimientos, deshidratación, y que, por el contrario, debe hacerse en las horas de menos radiación.
Los niños menores de 8 años son los más vulnerables a los efectos del marketing
Los anuncios y otros tipos de marketing de los productos ricos en azúcar o sal tienen un impacto inmediato e importante sobre los niños
Ningún padre que haya aguantado los insistentes ruegos de un niño que quiere ese colorido paquete de galletitas o esa variante de papitas se sorprenderá ante los hallazgos
de un nuevo estudio: los niños son más propensos a comer comida basura si han visto anuncios de alimentos y bebidas no saludables.
Los investigadores encontraron que los anuncios y otros tipos de mercadeo de los productos ricos en azúcar o sal tienen un impacto inmediato e importante sobre los niños.
Y que los niños menores de 8 años podrían ser los más susceptibles al mercadeo de las comidas y las bebidas basura.
Los hallazgos muestran la influencia que esos anuncios pueden tener sobre los niños.
Esta muestra que la exposición extensiva que los niños tienen a la publicidad de comidas y bebidas malsanas a través de los paquetes de los productos (los súper héroes, los logos),
la televisión e internet aumenta su ingesta calórica a corto plazo y su preferencia por la comida basura.
Los productos malsanos conforman más del 80 por ciento de todos los anuncios televisivos de comida en Estados Unidos y Canadá, según investigaciones anteriores.
Los autores del estudio anotaron que investigaciones recientes han revelado que los niños ven un promedio de cinco anuncios de comida por hora.
En general, nuestro análisis muestra la necesidad de una revisión de las políticas públicas sobre la publicidad de comidas y bebidas malsanas dirigido a los niños.
La creciente prevalencia de la obesidad parece coincidir más con los aumentos marcados en el presupuesto de publicidad dirigido a los niños y a los jóvenes de la industria de las comidas y las bebidas,
y los datos muestran que las comidas y las bebidas ricas en calorías y pobres en nutrientes conforman la mayoría de los productos mercadeados comercialmente.
El bypass gástrico y otras cirugías de pérdida de peso (conocidas colectivamente como cirugía bariátrica) implican hacer cambios en tu sistema digestivo para ayudarte a perder peso. La cirugía bariátrica se realiza cuando la dieta y el ejercicio no han funcionado o cuando tienes problemas graves de salud debido a tu peso. Algunos procedimientos limitan la cantidad que puede comer. Otros procedimientos funcionan reduciendo la capacidad del cuerpo para absorber nutrientes. Algunos procedimientos hacen ambas cosas.
Aunque la cirugía bariátrica puede ofrecer muchos beneficios, todas las formas de cirugía de pérdida de peso son procedimientos importantes que pueden presentar riesgos y efectos secundarios graves. Además, debes hacer cambios saludables definitivos en la dieta y hacer ejercicio regularmente para ayudar a garantizar el éxito a largo plazo de la cirugía bariátrica.
La cirugía bariátrica se realiza para ayudarte a perder el exceso de peso y para reducir el riesgo de que se presenten problemas de salud potencialmente mortales relacionados con el peso, como los siguientes:
Enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares
Presión arterial alta
Enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA) o esteatohepatitis no alcohólica (ENA)
Apnea del sueño
Diabetes tipo 2
Por lo general, la cirugía bariátrica se realiza únicamente después de haber intentado bajar de peso con mejores hábitos alimenticios y ejercicio.
A quién va dirigido
En general, la cirugía bariátrica podría ser una opción para ti si:
Tu índice de masa corporal es de 40 o más (obesidad extrema).
Tu índice de masa corporal es de 35 a 39,9 (obesidad), y tienes un problema de salud grave relacionado con el peso, como diabetes tipo 2, presión arterial alta o apnea del sueño grave. En algunos casos, puedes reunir los requisitos de ciertos tipos de cirugía de pérdida de peso si tu índice de masa corporal es de 30 a 34 y tienes problemas de salud graves relacionados con el peso.
La cirugía bariátrica no es para todas las personas que tienen sobrepeso grave. Es posible que tengas que cumplir con ciertas pautas médicas para reunir los requisitos para la cirugía de pérdida de peso. Es probable que tengas un extenso proceso de evaluación para ver si puedes someterte a ella. También debes estar dispuesto a hacer cambios permanentes para llevar un estilo de vida más saludable.
Es posible que te le pida que participes en planes de seguimiento a largo plazo que incluyan el control de tu nutrición, estilo de vida y conducta, y tus afecciones médicas.
Cómo prepararse
Si reúnes los requisitos para la cirugía bariátrica, tu equipo de atención médica te da instrucciones sobre cómo prepararte para tu tipo específico de cirugía. Es posible que necesites hacerte varias pruebas de laboratorio y exámenes antes de la cirugía. Puedes tener restricciones en la comida y la bebida y en los medicamentos que puedes tomar. Es posible que se te pida que inicies un programa de actividad física y que dejes de consumir tabaco.
También es posible que necesites prepararte y planificar con anticipación tu recuperación después de la cirugía. Por ejemplo, organízate para que te asistan en tu casa si crees que vas a necesitar ayuda.
Lo que puedes esperar
La cirugía bariátrica se realiza en el hospital con anestesia general. Esto significa que estarás inconsciente durante el procedimiento.
Los detalles de la cirugía dependen de tu situación particular, del tipo de cirugía para bajar de peso a la que te sometas y de las prácticas del hospital o del médico. En algunas cirugías para bajar de peso se realizan las tradicionales incisiones grandes, o abiertas, en el abdomen.
Hoy en día, la mayoría de las cirugías bariátricas se realizan por vía laparoscópica. Un laparoscopio es un pequeño instrumento tubular que tiene una cámara conectada. El laparoscopio se introduce a través de pequeñas incisiones en el abdomen. La diminuta cámara que está en la punta del laparoscopio le permite al cirujano ver y operar dentro del abdomen sin tener que hacer las tradicionales incisiones grandes. La cirugía laparoscópica permite que la recuperación sea más rápida y corta, pero no es conveniente para todas las personas.
La cirugía suele durar varias horas. Después de la cirugía, te despertarás en una sala de recuperación, donde el personal médico te controlará para detectar cualquier tipo de complicación. En función del procedimiento, es posible que debas permanecer unos días en el hospital.
Tipos de cirugía bariátrica
Cada tipo de cirugía bariátrica tiene sus ventajas y desventajas. Asegúrate de hablar con el médico sobre estas. A continuación, se describen los tipos más comunes de cirugía bariátrica:
Bypass gástrico en Y de Roux. Este procedimiento es el método más común de bypass gástrico. Por lo general, esta cirugía es irreversible. Logra disminuir la cantidad de alimentos que puedes comer de una vez y reducir la absorción de nutrientes.
El cirujano corta la parte superior del estómago para separarla del resto del estómago. De esta manera, se crea un reservorio que tiene más o menos el tamaño de una nuez y que sólo puede contener una onza (28 gramos) de comida. Normalmente, el estómago puede contener alrededor de 3 pintas (1,5 litros) de comida.
Luego, el cirujano corta el intestino delgado y cose una parte de este directamente en el reservorio. Así, la comida ingresa a este pequeño reservorio del estómago y, luego, pasa directamente al intestino delgado que está cosido a él. Los alimentos no atraviesan la mayor parte del estómago ni la primera parte del intestino delgado, sino que ingresan directamente a la parte media del intestino delgado.
Manga gástrica. Con la manga gástrica, se extirpa un 80 % del estómago, el cual adquiere la forma de una bolsa larga en forma de tubo. Como el estómago es más pequeño, no puede contener tanta comida. Además, produce una menor cantidad de grelina, la hormona que regula el apetito, lo cual puede llegar a aplacar el deseo de comer.
Este procedimiento tiene varias ventajas. Por ejemplo, permite perder una considerable cantidad de peso sin tener que redireccionar los intestinos. Además, los pacientes que se realizan la manga gástrica deben permanecer internados durante menos tiempo en comparación con la mayoría de los otros procedimientos.
El tipo de cirugía para bajar de peso que es mejor para ti depende de tu situación particular. El cirujano tendrá en cuenta muchos factores, como el índice de masa corporal, los hábitos alimenticios, otros problemas de salud, cirugías anteriores y los riesgos que implica cada procedimiento.
Después de la cirugía bariátrica
Después de la cirugía de pérdida de peso, generalmente no se te permitirá comer durante uno o dos días para que tu estómago y tu sistema digestivo puedan sanar. Luego, deberás hacer una dieta específica durante unas semanas. La dieta comienza con líquidos solamente, luego continúa con alimentos muy blandos hechos puré y, eventualmente, pasa a alimentos comunes. Puedes tener muchas restricciones o límites con respecto a cuánto puedes comer y beber y qué cosas.
También asistirás a controles médicos frecuentes para monitorear tu salud durante los primeros meses después de la cirugía de pérdida de peso. Es posible que necesites pruebas de laboratorio, análisis de sangre y diversos exámenes.
Resultados
El bypass gástrico y otras cirugías bariátricas pueden proporcionar una pérdida de peso a largo plazo. La cantidad de peso que pierdes depende de tu tipo de cirugía y del cambio de hábitos en tu estilo de vida. Puede ser posible perder la mitad o incluso más de tu exceso de peso en un plazo de dos años.
Además de la pérdida de peso, la cirugía de bypass gástrico puede mejorar o resolver afecciones que a menudo se relacionan con el sobrepeso, como:
Cardiopatía
Presión arterial alta
Apnea obstructiva del sueño
Diabetes tipo 2
Enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA) o esteatohepatitis no alcohólica (EHNA)
Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE)
Artrosis (dolor en las articulaciones)
La cirugía de bypass gástrico también puede mejorar tu capacidad para realizar actividades diarias de rutina, lo que podría ayudar a mejorar tu calidad de vida.
Cuando la cirugía para bajar de peso no funciona
La derivación gástrica y otras cirugías para bajar de peso no siempre salen tan bien como lo esperado. Si un procedimiento no funciona correctamente o deja de funcionar, es posible que no adelgaces y que contraigas graves problemas de salud.
Asiste a todas las citas de seguimiento programadas después de la cirugía. Si notas que no estás bajando de peso o si tienes complicaciones, consulta al médico de inmediato. El médico controlará tu peso y evaluará los factores que podrían estar haciendo que no adelgaces.
También es posible que no pierdas mucho peso o que vuelvas a subir de peso después de cualquier tipo de cirugía para adelgazar, incluso si la intervención en sí tiene éxito. Puedes llegar a aumentar de peso si no sigues los cambios de estilo de vida recomendados, como hacer actividad física con regularidad y comer alimentos saludables.
Las vitaminas son sustancias que el cuerpo necesita para crecer y desarrollarse normalmente. Las vitaminas B son:
B1 (tiamina)
B2 (riboflavina)
B3 (niacina)
B5 (ácido pantoténico)
B6
B7 (biotina)
B12
Ácido fólico
Estas vitaminas ayudan al proceso que hace su cuerpo para obtener energía de la comida que usted consume. También ayudan a formar glóbulos rojos. Usted puede obtener vitaminas B en las proteínas como pescado, pollo, carne de res, huevos y productos lácteos. Los vegetales de hojas verdes, frijoles y judías también tienen vitaminas B. A algunos cereales y panes también se les ha agregado vitaminas B.
Si usted sufre una deficiencia de vitaminas B, puede sufrir enfermedades. La falta de las vitaminas B12 o B 6 puede causar anemia.