Obesidad y deficiencia de microelementos

Obesidad y deficiencia de microelementos

La deficiencia de zinc es la deficiencia de microelementos más frecuente tras la cirugía metabólica

Las deficiencias de microelementos, principalmente hierro y zinc, y de vitaminas son frecuentes en pacientes con obesidad. Por eso, se deben investigar los valores de los microelementos y las vitaminas antes de la cirugía metabólica y corregir las deficiencias para contribuir a reducir la prevalencia de estas después de la cirugía.

El zinc se absorbe en el intestino delgado y por eso el bypass gástrico en Y de Roux o la derivación biliopancreática, que excluyen parcialmente los alimentos de parte del intestino delgado, pueden causar malabsorción de zinc. La deficiencia de zinc es la deficiencia de microelementos más frecuente tras la cirugía metabólica y afecta al 42,5% de los pacientes tras un año del bypass gástrico y al 25,6% tras un año de la gastrectomía en manga.

La prevalencia de deficiencia de zinc posterior a la derivación biliopancreática puede ser de hasta el 91,7% un año después de la cirugía. Las manifestaciones de la deficiencia de zinc moderada son

  • hipogeusia
  • hiposmia
  • anorexia
  • eczema
  • somnolencia
  • disminución de la adaptación a la oscuridad

Mientras que las formas graves se asocian con:

  • acrodermatitis enteropática
  • dermatitis ampollar o pustulosa
  • diarrea
  • caída del cabello
  • alteraciones mentales, entre ellas depresión
  • infecciones recurrentes debidas a alteración de la función inmunitaria.

La anemia macrocítica o microcítica oscila entre el 5% y el 64% tras el bypass gástrico, el 20 y el 52% tras la gastrectomía en manga y el 5% y el 39% tras la derivación biliopancreática.

El hierro se absorbe predominantemente en el duodeno y la parte superior del yeyuno. Cuando el volumen gástrico se reduce y el tránsito duodenal se evita, como sucede en el bypass o en la derivación biliopancreática, la absorción de hierro disminuye.

Además, el hierro se absorbe tras la formación de un complejo de la forma férrica con la reductasa férrica en el borde en cepillo del enterocito y el ácido gástrico es esencial para disminuir el pH intestinal a fin de oxidar la forma ferrosa a la forma férrica. Después del bypass gástrico, al ser el pH gástrico mayor que lo normal, la forma ferrosa no se oxida.

En un estudio, 58 mujeres con menstruación recibieron hierro tras la cirugía metabólica. En promedio la absorción de hierro hem antes de la cirugía era del 23,9%, y 12 meses después de esta había descendido al 6,22%. La absorción de hierro no hem descendió del 11,1% al 4,7%.

El hierro total estaba afectado levemente tras la gastrectomía en manga y en forma grave tras el bypass gástrico. El 15% de los pacientes sometidos al bypass gástrico o a la derivación biliopancreática sufren anemia ferropénica.



Deficiencias vitamínicas

El síndrome de Wernicke–Korsakoff, caracterizado por la deficiencia de vitamina B1 (tiamina) y la presencia de confusión, ataxia y nistagmo, se mencionó tras el bypass gástrico en Y de Roux y la derivación biliopancreática.

La vitamina B1 se absorbe en el yeyuno, que está totalmente excluido del tránsito de nutrientes en ambas intervenciones. Pero el síndrome de Wernicke–Korsakoff también se mencionó tras la gastrectomía en manga, ya que esta reduce la acidez gástrica y posteriormente la absorción de tiamina. Los vómitos tras la cirugía metabólica pueden empeorar el riesgo del síndrome de Wernicke– Korsakoff debido a la pérdida de la acidez gástrica.

Los folatos de la alimentación se absorben en el borde en cepillo intestinal y por lo tanto el bypass gástrico y la derivación biliopancreática causan deficiencia de folatos que puede producir anemia megaloblástica. Es necesaria la administración de folatos.

La exclusión gástrica parcial del tránsito de alimentos tras el bypass gástrico, la derivación biliopancreática o la gastrectomía parcial tras la derivación biliopancreática con cruce duodenal, disminuyen la concentración del factor intrínseco gástrico en el estómago y por lo tanto reducen la absorción de vitamina B12.(cobalamina).

La 5-desoxiadenosilcobalamina es necesaria como cofactor en la conversión de L-metilmalonil- CoA a succinil-CoA, que es central no solo para la producción de energía celular, sino también para la síntesis de hemoglobina. La deficiencia materna de vitamina B12 y folatos en el embarazo puede causar anomalías neurológicas fetales.

La vitamina D es liposoluble y para que el yeyuno y el íleon la absorban debe ser solubilizada por la incorporación en soluciones micelares de sales biliares.

La malabsorción de vitamina D es común tras la derivación biliopancreática y el bypass gástrico, a pesar de que se la administre, porque los jugos biliopancreáticos son derivados distalmente a la rama común y excluyen a una parte del intestino delgado del tránsito de jugo biliar y pancreático. La gastrectomía en manga también puede causar deficiencia de vitamina D, que se observa en el 30% de los pacientes después de la cirugía.

El calcio y el fósforo se absorben en el duodeno y el yeyuno y por eso el bypass gástrico y la derivación biliopancreática a menudo se asocian con disminución de la absorción de calcio, aunque haya buen aporte de vitamina D y calcio. Además. la absorción fraccionada de calcio disminuye considerablemente tras el bypass gástrico y la derivación biliopancreática, que podrían contribuir al riesgo de fracturas.

Algunos casos de hemorragia intracraneal del feto y el recién nacido, asociados con la deficiencia materna de vitamina K se mencionaron tras la derivación biliopancreática, pero también tras la cirugía laparoscópica de banda gástrica ajustable.


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